Dia 13 El Valle Sagrado

Foto poblado Inca en Pisac

Salimos temprano a recorrer el mitico Valle Sagrado. El dia es claro y la primera parada es en un mercadillo en medio de un monte donde podemos ver y comprar objetos tipicos de aqui, no faltan las Llamas ni las niñas ataviadas con su traje tipico. El lugar esta organizado y decenas de autobuses paran alli para este primer contacto. Regateo y mas regateo, es increible, bajan rapidamente el precio en cuanto das un paso para irte. De tres en 3 soles ademas. Nada es lo que parece, nada cuesta lo que vale. Se abusa.

Seguinos hasta Pisac, un lugar increible por el sitio donde esta, hay que caminar durante una hora para subir a su monumetal ciudad construida en medio de un monte a casi 3500 metros de altitud. Alli las piedras cobran una nueva dimension, el guia nos explica la zona agricola de la montaña, donde enterraban a los muertos y la precisa ubicacion entre los puntos cardinales que son el complejo sistema de orientacion de los Incas, cerca del Inti, con la madre tierra, entre los puntos montañosos que anunciaban la salida y la puesta del sol. Piedras increibles subidas hasta alli para adorar al astro. Altares, canalizaciones de agua perfectas, pozos del tamaño de una persona para purificarse, alojamientos en disposicion trapezoidal con vigas de piedra para soportar los envites de los terremotos.

Un lugar fantastico por el dificil acceso, por la caminata, por la lluvia que nos golpeo en el camino, por el sol que brillo en la cumbre. Estos ingenieros primitivos canalizaron nada mas de 700 kilometros del rio que fecunda este valle. Construccion que hoy todavia sobrevive y sirve para las labores agricolas, si Machu es un fenomeno paranormal por el lugar donde se halla, Pisac es el mas increibe de los sitios para ejecutar construcciones.

Las canteras estaban a 4 0 5 kilometros y esas escarpadas pendientes eran inhumanas, se ensamblaban las piedras una a una sin masa alguna - ni barro, ni unguentos- solo los canteros sabian el modo preciso de golpear para que cada trozo de roca se uniera y quedara perfecta, para que nosotros 1.000 años despues podamos verlas y tocarlas. Hay que subir a Pisac para reconocer que esos hombres si eran extraterrestres.

Salimos en busca de un nuevo rastrillo en el pueblo y desde alli partimos a comer. Unas horas mas tarde estamos en Ollantaytambon, el unico pueblo Inca que se conserva tal como fue como concebido por sus pobladores, alli , en aquellas casas, por aquellas calles, por las canalizaciones subterraneas hoy viven los descendientes de aquellos pobladores.Todo sigue en pie, tal y como estaba, el terreno de piedra, las subidas a los departamentos agricolas, su mirador del sol. El pueblo se ha convertido en un lugar de peregrinacion de iniciaticos. Tiene hostales, tiendas de deportes de aventuras, pub, mucho turismo de mochila que empieza ahi su trayectoria a la busqueda del Machu. Desde aqui parte el tren que nos llevara a la mitica ciudad Inca. Repongo fuerzas en El Albergue que regentan una norteamericana Wendy y una peruana Adela, el hotelito esta dentro de la estacion y tengo que traspasar una valla metalica para acceder a su interior, aqui solo pueden pasar los turistas con billete. Adela me recibe cariñosa al decirle que vengo de parte de Carlos y en el jardincito del aquel lugar termino las ultimas paginas de Gabo.

Empieza anochecer, en la cocina acompañado de un Té y con una bombilla de apenas 25 vatios, escribo las sensaciones de la novela de Marquez, aquel entorno hace que me empape del sentido de cada frase. Mi tren sale a las 20 h mientras escucho el andar de los vendedores ambulantes en el anden, los primeros pasajeros y las enormes montañas que colindan la estacion presagio de lo que despues vendria. Esa noche llegamos a Aguas Calientes el pueblo que da vida a Machu Pichu territorio administrativo de la region. Despues de un viaje de 2 horas y media, subimos las empinadas aceras de Aguas en buca de La Cabaña el hostal donde dormire. Pido que me despierten a las siete de la mañana. Una de las 7 maravillas del mundo hay que visitarla temprano, el tiempo es tan cambiante alli arriba que merece subir pronto para disfrutar en plenitud de un paisaje tan especial como vibrante. Cae la noche en los corazones de los viajeros. Mañana nos espera el pasado.